El mes de abril ha comenzado como se fue marzo, inestable. Pese a las borrascas que pasan una tras de otra, la temperatura poco a poco escala el termómetro y la naturaleza sale de su letargo a borbotones de verdes y multicolores que cuajan los campos de flores. Las aves llegan de sus cuarteles de invernada y se afanan por recomponer los nidos que darán cobijo a la primera pollada del año. Cervatillos, corcinos, rayones…son los recién llegados de nuestros montes, mientras en las huertas, la actividad comienza a ser desenfrenada con la siembra y la recolección de las últimas coles, repollos, habas y alcachofas de la temporada.
Las festividades en honor a San Jorge y la Feria de abril, comienza a llenar de aire festivo a nuestros pueblos, que están dando la bienvenida a la primavera.